La Plataforma pretende ligar la periferia fluvial con el casco urbano a base de paseos fluviales, parques, playas, azudes o embarcaderos
Día 14/08/2012
La Plataforma de Afectados por las Inundaciones del Guadalquivir ocurridas en 2010 no se limitan a contemplar la lenta actuación de los responsables políticos, sino que han querido aportar su granito de arena para mejorar el río y a la propia ciudad con un proyecto para unir la periferia fluvial -desde Alcolea hasta Encinarejo- con el centro urbano que ya han presentado a las diferentes administraciones y partidos de la ciudad.
Por el momento, la plataforma considera que «queda todo por hacer en el río», ya que, salvo la zona del núcleo urbano, «ni se ha limpiado ni se ha hecho nada para evitar riadas que volverían a causar estragos si se vuelven a producir», advirtió el presidente de este colectivo, Francisco León. Así, por ejemplo, quedan por hacer unas balsas en la Albolafia para incorporar el río en la ciudad, limpiar parte del arroyo Guadalbarbo en su desembocadura con el Guadalquivir, o adecentar la caja del río en su unión con el pantano de San Rafael de Navallana.
Balance positivo
Según el presidente de este colectivo, Francisco León, el balance de estos encuentros, el último de los cuales tuvo lugar el pasado 9 de julio con la delegada del Gobierno de la Junta, Isabel Ambrosio, y el entonces delegado de Medio Ambiente, José Ignacio Expósito, «es positivo», en el sentido de que todos, «en mayor o menor medida, han mostrado su interés en la iniciativa», aunque también les han dejado claro a la plataforma que no hay dinero para tan magno proyecto.
Y es que la idea de este colectivo es que a los proyectos que siguen pendientes de ejecutar en el río, «como la segunda fase del Guadalquivir o el parque de ribera Puente Mocho en Alcolea para elevar la cota de inundabilidad desde los 108 metros actuales hasta los 113, que tanto Emacsa como la Confederación (CHG) solicitaron en su día por escrito que se ejecutaran», se ligue ahora otra serie de actuaciones, cuyo coste el propio alcalde, José Antonio Nieto, calculó que costaría en torno a los 80 millones de euros.
Así, el proyecto conlleva la creación de paseos fluviales, embarcaderos hasta el jardín botánico y conexión con las servidumbres; azudes y playas artificiales en el río; una nueva ruta de los museos de Córdoba por barco; la prolongación de la escollera del Aeropuerto hasta más allá de la curva donde confluyen el Guadajoz y el Guadalquivir, o la conexión de la periferia con la sede deportiva del Círculo de la Amistad y por el otro lado con Alcolea y Encinarejo mediante carriles-bici y paseos. De igual modo, se considera beneficioso la elaboración de un proyecto medioambiental en condiciones para solicitar la Capitalidad Europea del Medio Ambiente, que incluiría parques, zonas de ocio y de recreo, con merenderos o restaurantes, mientras que en La Altea se habla de poner en marcha una ecourbanización en conexión con paseos fluviales del río, con un coste de 1,3 millones de euros, «lo que supone que sería más económico que limpiar el río, como hasta ahora se ha venido haciendo», abundó.
Francisco León no supo poner un coste a toda esta iniciativa, aunque consideró que sería menor a los 80 millones estimados por el regidor, y apuntó que se podría financiar bien a través de los Fondos Feder o bien a través de otros programas comunitarios de la UE, como la Agenda Local 21. En cualquier caso, la CHG «ya nos ha avanzado que ella se encargaría de adelantar el dinero, ya que luego la UE le revertiría esas cantidades en cuanto comprobasen la evolución de los trabajos», pero se trata de un proyecto «de ciudad» que aúna a todas las administraciones, quienes tendrían que asumir entre el 20 y el 30 por ciento del coste definitivo.
Eso sí, con cierta prisa, puesto que los técnicos de la Confederación han advertido que en breve «gran parte de los dineros de la Unión Europea se destinarán a los países del Este, que también piden paso en la UE», explicó.
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